¿Qué pasa si una embarazada toma una copa de vino?

¿Estás embarazada y en ocasiones se te antoja alguna copa de vino tinto o tu drink favorito? Durante años los expertos han explicado que como cada embarazo tiene distintas complejidades, no se puede generalizar si tomar una copita de vino de vez en cuando durante el embarazo es seguro.

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Si partimos de que, en particular, el vino tinto debe tener un mínimo de 9% vol., el grado alcohólico casi siempre puede ser superior a 11,5%, hablamos de que una copa de vino durante el embarazo jamás podría sonar a algo seguro, al menos no en exceso.

Por eso, la ciencia explica qué pasa si una embarazada toma una copa de vino 

La CDC explica tan claro como el agua que, en general, durante el embarazo no se debe tomar ninguna cantidad de alcohol sin correr algún tipo de riesgo.

Todas las bebidas que contienen alcohol pueden afectar al bebé en gestación. Una lata de cerveza de 12 onzas tiene la misma cantidad de alcohol que una copa de vino de 5 onzas o 1 onza de licor fuerte. Si en 9 meses tomas una, tal vez no sea grave, pero los expertos siempre recomiendan evitarlo.

Incluso, la misma publicación explica que tomar vino en el embarazo podría -no siempre- provocar un aborto espontáneo, e incluso muerte fetal.

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Por otro lado, existen los riesgos del Trastorno del Espectro Alcohólico Fetal (TEAF), que pueden incluir problemas físicos, de comportamiento y de aprendizaje en el niño.

Y la forma más grave de TEAF es el Síndrome de Alcoholismo Fetal (SAF), que implica deficiencias de crecimiento, problemas con el sistema nervioso central y anomalías faciales.

¿Cuántas copas de vino puede tomar una embarazada?

Una alternativa es tomar bebidas sin alcohol, incluso en Estados Unidos es un gran trend tomar los famosos mocktails y bebidas que parecen alcoholicas pero que no lo son.

Un mocktail es la recreación de un cóctel pero sin alcohol. O como indica el propio nombre en inglés, una parodia o simulación (mock) de un cóctel (cocktail).

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Y si hablamos de tomar alcohol durante el embarazo, también podemos pensar que hoy en día existen un sinfín de vinos sin alcohol. Así que, la próxima vez que se pregunten qué pasa si una embarazada toma una copa de vino, piensen en los bebés.

El vino sin alcohol es vino que ha pasado por un proceso para eliminar la mayor parte del contenido de alcohol. El producto resultante típicamente contiene menos del 0.5% de alcohol por volumen (ABV, por sus siglas en inglés), en comparación con el vino regular, que puede variar aproximadamente entre 5% y 15% de ABV.

Si bien el vino sin alcohol tiene un contenido de alcohol significativamente reducido, es importante tener en cuenta que aún puede contener pequeñas cantidades de alcohol y siempre es importante cuidar las cantidades y consultar con el ginecólogo.

¿El vino sin alcohol es buena opción?

Si bien pueden llegar a ser una alternativo para un brindis con poca cantidad, consideren que tienen residuos químicos, pues El proceso de eliminación del alcohol del vino puede implicar el uso de productos químicos o alterar la composición del vino.

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Redacción bbmundo