De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), 34 millones de niños en el mundo padecen pérdida discapacitante de la audición, pero 60% de los casos se deben a causas prevenibles, como evitar la exposición prolongada a ruidos fuertes.
Estudios internacionales de la OMS indican que casi el 50% de los adolescentes y jóvenes están expuestos a niveles perjudiciales de ruido, por el uso de aparatos de audio personales.
Clases en línea y audífonos: ¿cómo dañan los oídos de nuestros hijos?
Sin embargo, desde que comenzó la pandemia por el SARS-Cov-2, los niños han tenido sus clases en línea y la gran mayoría utiliza audífonos por más de cinco horas consecutivas y sin la supervisión de un adulto que pueda modular el volumen, lamenta María Guadalupe Nogues Vizcaíno, especialista en audiología, otoneurología y foniatría egresada del Instituto Nacional de Rehabilitación.
“Los niños —incluso desde los tres años de edad— están utilizando audífonos no solo durante las clases sino también para hacer la tarea, comunicarse con sus amigos y familia, así como también para entretenerse con una película o una serie. Ese tiempo acumulado es perjudicial para ellos”, indica la experta.
Ante esta situación, existe el riesgo de sufrir pérdida progresiva de audición, especialmente en los más pequeños, pues la exposición nociva a los sonidos depende de la intensidad, volumen, así como de la duración y frecuencia.
Por ello, la exposición a sonidos fuertes puede desencadenar en una pérdida de audición temporal o en acúfenos (sensación de zumbido en los oídos o de escuchar como un “vacío”).
Consejos para proteger los oídos de toda la familia
Nogues Vizcaíno explica que si bien no se pueden quitar las clases en linea sí deberán seguirse estas recomendaciones:
- Utilizar audífonos de diadema en los menores de 18 años. Evita lo que se insertan en el oído.
- Cambiar los audífonos de dos a tres días a la semana por bocinas, así dejas descansar el oído de tu pequeño.
- Por cada 30 minutos seguidos de uso de audífonos en menores de 18 años de edad, deben descansar el mismo tiempo; en los adultos son 30 minutos por cada hora y media consecutiva.
- Prefiere los audífonos que tienen un “tope” máximo de volumen, para que los menores de edad no le suban más de lo necesario.
- Si estás al lado de tu hijo que trae audífonos y escuchas a la maestra, debes bajarle al volumen
- Jamás introduzcan nada para limpiar tus oídos, incluso la cerilla sirve para protegerlos del exterior.
- Acude con el audiólogo u otorrinolaringólogo cada año para revisar cómo oye tu hijo.
- Nunca automediques el oído de tu familia, especialmente de los niños.
La encuesta nacional de salud y nutrición (National Health and Nutrition Examination Survey) de los Estados Unidos indica que la prevalencia de la pérdida de audición entre la población adolescente (de 12 a 19 años) aumentó considerablemente, del 3,5% al 5,3 por ciento. ¡La prevención está en casa, pues la pérdida de la audición por el ruido es irreversible!
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Guadalupe Camacho
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