Antes de la pandemia las encuestas ya señalaban que el hogar es usualmente el lugar más peligroso para las mujeres y sus hijos en México. Datos tristes y contundentes que nos hacen regresar a lo básico: la familia, el centro de todo, en donde nace cualquier conducta.
El escenario más violento debería ser el más pacífico
El 18 de mayo 2020, el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) denunció un incremento de la violencia contra los niños en México durante la pandemia del COVID-19 y urgió a las autoridades mexicanas a “reforzar la protección infantil”.
“El aumento en los niveles de estrés, la inseguridad económica y alimentaria, y el confinamiento a causa del COVID-19 han elevado radicalmente los niveles de violencia doméstica en México”, expresó Unicef en un comunicado.
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La otra cara de la moneda es la oportunidad que ofrece el actual confinamiento a causa del COVID-19 para fortalecer los vínculos familiares y crear una sana convivencia, elementos que contribuyen a la prevención de episodios de violencia en los hogares. El hogar, el escenario más violento durante la pandemia, debería de ser el espacio seguro de niños, niñas, mujeres y todo tiempo de familias; sin embargo; los datos arrojan que no siempre es así y lo que corresponde es tomar acciones para evitar que la violencia siga aumentando.
Con este propósito se llevó a cabo la charla online La familia perfecta no existe, la familia fuerte sí, organizada en el marco del Programa Nacional de Fortalecimiento Familiar, iniciativa creada por más de 40 organismos e instituciones como el Consejo de la Comunicación.
En la voz de expertos como Patricia Ganem, experta en educación y Salvador Guerrero Chiprés, Consejero Presidente del Consejo Ciudadano para la Seguridad y Justicia de la Ciudad de México; la plática virtual se realizó con el objetivo de dar a conocer los elementos que inciden en la unión familiar, en el manejo de la salud emocional y, sobre todo, con el objetivo de otorgar las herramientas necesarias para fortalecer la armonía en casa.
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La que medida de seguridad que se traduce en quedarnos en casa, supone mantenernos a salvo del riesgo de contagio de Covid-19; sin embargo, para muchas personas, estar en casa, es igual a estar en un espacio de riesgo, donde los niños, niñas, adolescentes, mujeres y personas mayores son los más expuestos a sufrir violencia. No debería ser el escenario más violento durante la pandemia.
Patricia Ganem, ofreció la charla “Fortalecimiento de la relación entre padres e hijos a partir del COVID-19”. Comentó que una de las claves para lograr una dinámica familiar favorable para todos sus miembros es la gestión inteligente de las emociones a nivel individual, el respeto de espacios comunes, establecer horarios, generar espacios de convivencia individual y colectiva, y tomar en cuenta los puntos de vista de todos para la toma de todas las decisiones en el hogar. Crear un ambiente de cooperación, armonioso y amoroso, que favorezca la confianza.
“Hoy más que nunca debemos enseñar a nuestros hijos los valores fundamentales de la vida. Este acontecimiento brinda a los padres de familia la oportunidad de entender que esta es su mayor aportación, y ver hacia dónde y cómo dirigirlos y qué elementos emocionales les brindan a sus hijos para enfrentar cualquier situación”, indicó la experta.
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Por su parte, el experto Salvador Guerrero Chiprés, habló sobre “Salud emocional: herramientas y consejos para transitar la emergencia”.
Guerrero comentó que de acuerdo con cifras del organismo que encabeza, el 96% de los casos de violencia familiar ocurre en el hogar, y señaló que entre los sectores de la población más vulnerables a sufrir esta situación, son los relacionados con la economía informal y el desempleo ya que la falta de estabilidad económica genera estrés y ansiedad en las familias.
También se hizo mención de la campaña #NoEstásSola, que también se suma a las iniciativas para prevenir que se convierta en el escenario más violento durante la pandemia, atacando la violencia familiar, en colaboración de la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México y de la Secretaría de las Mujeres, para la cual está disponible la Línea de Seguridad y el Chat de Confianza 55 5533 5533.
Las víctimas que se comunican (en su mayoría documentadas como mujeres, quienes sufren la violencia y quiénes reportan los hechos violentos), cuentan con el apoyo del Consejo Ciudadano, así como de su equipo de psicólogos y abogados”, mencionó Guerrero Chiprés.
Roxana Núñez, Directora de Asuntos Corporativos del Consejo de la Comunicación reiteró que están en la propuesta de acciones que ayuden a generar una cultura de prevención y de valores familiares que son necesarios para impulsar hogares armónicos.
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“Esta etapa de aislamiento social en los hogares mexicanos nos brinda una oportunidad para fomentar los valores que fortalecen los vínculos familiares como la tolerancia, la comunicación, la solidaridad y la empatía, variables que crean un entorno seguro y relaciones más sólidas”, comentó.
El Programa Nacional de Fortalecimiento Familiar #FuerzaFamilias, impulsado por distintas organizaciones tanto empresariales como de la sociedad civil, seguirá llevando a cabo este tipo de charlas y promoviendo la campaña de comunicación enfocada en cuatro pilares: crianza positiva; comunicación y convivencia; tolerancia y respeto; así como educación y valores.
Ya fue reconocido por Christian Skoog, representante de Unicef en México, que las consecuencias del COVID-19 en la infancia y adolescencia en nuestro país, no serán causadas mayormente por la enfermedad en sí; serán más bien secuelas de las medidas necesarias para prevenir el contagio”.
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Para entender la relevancia de programas como #FuerzaFamilias, corresponde conocer algunos datos:
- Seis de cada 10 menores de entre 1 y 14 años han sufrido “disciplina violenta” a nivel familiar, situación “agravada ahora con el confinamiento”.
- Durante esta crisis sanitaria, las llamadas a refugios reportando violencia aumentaron entre el 60 % y el 80%, mientras que las solicitudes de asilo en estos espacios subieron un 30%.
- De acuerdo con datos de Unicef, se ha reportado el aumento de las llamadas de emergencia por abuso, acoso, violación, violencia de pareja o violencia familiar durante la cuarentena.
Se puede concluir que el ciclo de la violencia se reproduce en los hogares sin afecto, por lo que se convierten en el escenario más violento durante la pandemia.
Tenemos que cuidarnos desde la familia, no dejar de ver que 9 de cada 10 personas agredidas en el hogar son mujeres, por ello la crianza positiva y la educación en valores debe de prevalecer en casa para garantizar el bienestar de las familias. Si hay familias fuertes, vamos a tener sociedades íntegras y ricas emocionalmente.
Para más información visita: www.fuerzafamilias.org
Facebook: @FuerzaFamilias
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