Ser mamá después de los 40 años ¿por qué se volvió una tendencia?

Con el paso del tiempo, ser mamá después de los 40 años se empezó a volver opción porque las mujeres se sentían mentalmente y emocionalmente más seguras y preparadas.

Recientemente, la bbc compartió la historia de María Barrau, que fue mamá a los 46 años y asegura que fue un buen momento para este gran paso y más porque la perspectiva que tiene ahora es totalmente distinta.

Según la National Library of Medicine, los beneficios de ser mamá después de los 40 años está más enfocado en un tema emocional e incluso de estabilidad mental, o al menos eso fue lo que pasó con María, que decía que quería ser mamá cuando su ansiedad quedara atrás.

Cabe señalar que, la bbc compartió un estudio de la Unión Europea que indica que España es el país europeo con mayor casos de madres a esta edad o al menos que eligen la maternidad después de los 40.

Estos son los beneficios emocionales que tiene ser mamá después de los 40 años

Estabilidad financiera. Es probable que para ese momento una mujer o una pareja tenga ahorros que le ayuden a llevar un mejor ritmo de vida que cuando tenía 20 o 30 años. Esto puede darle tranquilidad e incluso generar menos estrés.

Madurez emocional. Ser mamá después de los 40 años trae consigo cierta madurez que tal vez no se tiene a los 30 y es porque ya pasó un tiempo para experimentar la vida y aprender de algunos errores.

Confianza y paciencia. Tienes una mejor comprensión de ti mismo, de tus fortalezas y debilidades. Esto puede ayudar a que mamá tenga más seguridad para tomar algunas decisiones.

Inteligencia emocional. La maternidad después de los 40 trae consigo mayor estabilidad emocional porque ya hay vivencias y situaciones que cambian la percepción que pueda existir sobre el mundo y la sociedad. Esto puede ayudar a ser más comprensiva con las necesidades y deseos de un hijo.

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Experiencia. Ser mamá después de los 40 años podría ser sinónimo de que ya pasó tiempo para aprender sobre la crianza de los hijos. Esto puede ayudar a tomar mejores decisiones y darle atención plena.

Estado de gratitud. Ser mamá después de los 40 años representa mayores experiencias y para ese momento una mujer puede sentirse mucho más plena y agradecida por todo lo que ha vivido y así tendrán menos expectativas de la maternidad, la crianza e incluso de una mujer como mamá.

Mayor apertura mental. Es probable que una mujer tenga una mente más abierta y acepte compartir la crianza desde una perspectiva más receptiva. Esto puede ayudar a criar a un niño que también sea de mente abierta y que acepte a los demás con más empatía.

Si una mujer decide ser mamá después de los 40 años es importante sopesar cuidadosamente los pros y los contras y tomar la decisión que sea mejor, tomando en cuenta la salud.

Lo que dicen las cifras

Hace tiempo el New York Times citaba a la Dra. Van Dis, que explicaba que las mujeres entre 40 y 44 años tienen un 33 por ciento de posibilidades de sufrir un aborto espontáneo.

Sin embargo, en todos los embarazos se cree que el riesgo de aborto espontáneo está más cerca del 10 al 20 por ciento, aunque las estimaciones pueden variar.

Incluso, el mismo New York Times explicaba que las tasas de fertilidad están aumentando entre los padres mayores, la infertilidad sigue siendo un problema.

Según el Colegio Estadounidense de Obstetras y Ginecólogos , la fertilidad de las mujeres comienza a disminuir de manera gradual pero significativa a partir de los 32 años y luego se reduce más rápidamente a partir de los 37 años.

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Redacción bbmundo