Mitos del sueño infantil

Las expertas del buen dormir te hablan sobre los cinco mitos del sueño infantil que debes ignorar si quieres establecer una sana rutina para tus hijos y para ti misma. Conócelos…

5 mitos del sueño infantil que debes ignorar

 

1. Que no duerma siesta para que caiga rendido:

 

Nos dicen o nos suena lógico saltarnos siestas para que duerma mejor, pero sucede que el cuerpo se agota y produce la hormona del cortisol que hace que en vez de descansar no se llegue a sueño profundo, existan insomnios o empiecen el día en la madrugada, o sea, resulta contraproducente.

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2. Le doy más de cenar para que duerma más:

 

Uno de los mitos del sueño infantil más común es aumentar cantidades de comida, darles cereal en la leche, literal “rellenarlos”. Si sobrealimentas a un bebé (mismo caso que en adultos) el cuerpo se enfocará en digerir en vez de descansar y por otro lado, si lo hacemos con bebitos que no están listos para sólidos comprometemos su sistema digestivo así como el instinto de saciedad.

3. Que se duerma tarde para que se despierte tarde:

 

Falso, por un tema de bioritmo, o sea, los niños tienen una hora consistente de despertar, comúnmente entre las 7 y 8 am, si los acostamos más tarde, de todas formas se levantarán a las mismas 7 am, pero con menos horas recorridas, entendiendo que deben dormir aproximadamente 11 horas ininterrumpidas, esta falta de sueño derivará en mal humor y si lo llevamos a una práctica diaria, hasta el desarrollo sano puede verse afectado.

Por otro lado: El uso del ruido blanco para el sueño de los bebés

4. Mi hijo tiene terrores nocturnos:

 

No todas las manifestaciones de sueños “feos” son terrores nocturnos ya que no son lo mismo que una pesadilla. Este es otro de los mitos del sueño infantil que debes ignorar.

La incidencia de terrores nocturnos es muy baja y se presenta más en hombres, es cuando nuestro hij@ grita, se agita, suda, se puede incorporar, hasta abrir los ojos y no reconocernos. Esto es por cansancio excesivo lo que hace que una fase de sueño “no encaje con la que sigue” y lo vemos en la primera mitad de la noche.

En cambio, las pesadillas son esos sueños que recordamos, suceden en la segunda mitad de la noche y todos lo hemos experimentado como ese mal momento que nos despierta y nos damos cuenta de que estábamos dormidos.

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5. Mi hijo no puede dormir toda la noche hasta que deje de lactar y/o colechar:

 

No hay escenario más falso, el comer o compartir cama como una decisión familiar, no tiene que verse afectado, no hay relación entre conciliar el sueño y depender del pecho, mamila o presencia de los padres. Si enseñas a dormir a tu hijo en tu cama desde el inicio de la noche con sus propios recursos, no habrá necesidad de eliminar ninguna práctica. Por favor olvídate de estos mitos del sueño infantil.

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