Salen de una tienda y lo notas extraño con las manos dentro de las bolsas del pantalón. Unos pasos después, entre contento y preocupado dice que tiene algo que contarte: trajo consigo el par de dulces que no quisiste comprarle. ¡Tranquila!
Aunque puedes quedar confundida por la situación, es algo que los padres enfrentan alguna vez. De acuerdo con la American Academy of Child Adolescent Psychiatry, entre los tres y cinco años de edad es cuando los niños comprenden que tomar algo que no es suyo es una conducta incorrecta; sin embargo toma en cuenta que, al obtener una recompensa fácil e inmediata, es probable que vuelva a intentarlo.
Si ya pasó
- Actúa de inmediato sin perder la calma. Aunque sea un objeto de poco valor, pregúntale por qué lo hizo y acompáñalo a que lo devuelva y ofrezca una disculpa
- Explícale las consecuencias. Dile que es inapropiado porque daña a otra persona. No subestimes su comprensión y utiliza casos prácticos: “¿Qué sentirías si alguien se llevara tu muñeco favorito?”
- No lo insultes. Omite palabras que dañen su autoestima como “ladrón”; deja en claro que tu rechazo es hacia el comportamiento, no hacia a él
- Supervísalo. Así podrás identificar si hay algo más detrás del hecho para modificarlo y establecer límites
- Elógialo cuando sea honesto. Felicítalo por los cambios en su actitud, por ejemplo cuando pida las cosas prestadas y las regrese
Para prevenirlo
- Empieza con pequeños detalles. Cada vez que tome algo ajeno, incluso un juguete, haz que lo lleve con su dueño; de esa manera entenderá conceptos y valores como propiedad, respeto y honradez
- Mantén una buena comunicación. Dale confianza para lograr que no mienta o haga cosas a escondidas. Bríndale seguridad para acercarse y compartir sus inquietudes. Si tiene muchas ganas de algo que no puedes adquirir en el momento, motívalo a guardar de sus ahorros para tenerlo muy pronto
¿Por qué lo hace?
Después de los seis años, un niño es consciente de que el robo es inadecuado, pero puede hacerlo para:
- Conseguir la atención de sus padres
- Tener la aceptación de los compañeros de clase como alguien intrépido y valiente
- Imitar a los amigos
Si a pesar de tus esfuerzos persiste, consulta a un especialista porque podría tratarse de un problema emocional.
Redacción bbmundo
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