Si eres una mamá primeriza, seguramente al ver las primeras popós de tu bebé podrías alarmarte porque estarás esperando encontrar la consistencia y el color de la de un adulto promedio; sin embargo no es así ya que todo depende de la alimentación que tenga.
¡No te alarmes!
Hay que entender que es normal que en un principio la popó de los recién nacidos pueden ser de color negro verdoso. A esto se le conoce como meconio, una mezcla de las heces que acumuló durante la gestación, con sangre y líquido amniótico.
Más adelante, al ingerir leche materna tomará un tono verde más claro y posteriormente un color amarillo. Todo depende de la alimentación que esté recibiendo.
Checa: Papillas que no debes darle a tu bebé
Cabe destacar que el color no es todo lo que importa, también hay que tener en cuenta la consistencia. Aunque en un principio pueden ser heces muy líquidas, después de empezar a ingerir la leche materna tendrá que ser un poco más sólida. Si la popó líquida y verde perdura a lo largo de los días, hace del baño más veces de lo normal y el ano se está poniendo rozado, es probable que tenga diarrea y debas llevarlo al pediatra.
El 90% de los recién nacidos producen su primera deposición en las primeras 24 horas de vida, el resto la suele producir a las 36 horas
Toma en cuenta que si consumes vitaminas, suplementos o algún medicamento mientras estás lactando, esto también influye en la digestión de tu bebé. Por ejemplo: si consumes algún suplemento de hierro, las heces serán verde oscuro. Por otro lado, si tu bebé toma fórmula, ten en cuenta que podrían ser pastosas y de color amarillo o canela, ya que sus componentes cambian la flora intestinal.
Pasada la semana, el bebé deberá haber expulsado todo el meconio, lo que significa que es un bebé saludable y los tractos gastrointestinales y urinarios del bebé funcionan bien.
Para conocer la popó que debe tener tu bebé, dependiendo su edad, te invitamos a consultar nuestro especial:
Melissa Espinosa
No hay comentarios.:
Publicar un comentario